Comunidades saludables: Juana Culantro

En muchos de los hogares guatemaltecos, la cocina es el centro de convivencia y en el interior del país las familias cocinan a fuego abierto. Los principales efectos nocivos que tiene cocinar de esta forma son las quemaduras, enfermedades pulmonares y respiratorias, así como enfermedades en la piel y ojos, siendo las mujeres y niños los más afectados.

Juana tiene 27 años vive junto a sus dos hijas y su esposo en la comunidad Joya Grande en Chimaltenango, cuenta que a los 8 años empezó a cocinar junto a su mamá en una estufa construida con 4 blocks que sostenían la parrilla en donde cocinaban sus alimentos.

Ella recuerda que no había un solo día que la vivienda de su mamá no tuviera humo, cuando se casó y se fue a vivir con su esposo, la cocina se encontraba separada de las habitaciones lo que les permitió descansar sin el molesto humo; sin embargo, en la cocina no se podía permanecer, nos cuenta Juana.

Con el apoyo de voluntarios a Juana se le construyó una Estufa Mejorada, la cual reduce el 95 por ciento del humo dentro de la vivienda y el consumo de leña, mejorando la economía del hogar y la salud de las familias guatemaltecas.

“Me siento muy contenta con esta nueva estufa, mi casa ya no se  llenará de humo, agradezco a los voluntarios que me ayudaron a construirla, fueron momentos de mucha alegría cuando se terminó de construir”. Juana Culantro, beneficiaria Hábitat.