Un mejor futuro para la familia

Saúl y su esposa, Lourdes, son los orgullosos propietarios de una casa Hábitat! Viven con sus tres hijos, Jefferson, Oliver y William. Saúl trabaja como mecánico industrial, mientras que Lourdes se ocupa del hogar.

Antes de asociarse con Hábitat Guatemala para construir su casa, la familia vivía en la casa de la mamá de Lourdes, y compartían la habitación los cinco.

Lourdes y su esposo se enteraron de Hábitat a través de un amigo, habían logrado comprar su terreno desde antes, por lo que al poder decidieron buscar la ayuda de Hábitat y solicitar el crédito con el cual podían construir su nuevo hogar.

“Tengo una sensación de tranquilidad, ¡ahora tenemos mucho más espacio! Nuestros niños pueden jugar y hacer lo que quieran aquí, tienen un espacio solo para ellos” En el futuro, la familia planea pintar la casa y agregar habitaciones adicionales.

Con respecto a la pandemia de COVID-19, Lourdes menciona: “Nos mudamos a nuestra nueva casa cuando la pandemia recién comenzaba. Al principio fue duro y extrañamos a nuestra familia, pero con el tiempo nos acostumbramos y ahora estamos mejor y tranquilos ”, continúa,“mis hijos pueden jugar con los niños de los vecinos ahora pasan mucho tiempo juntos”.

Proyecto de mejoras en Huehuetenango

Gracias al apoyo de donantes como Home for a Home, Hábitat Guatemala ha implementado desde enero hasta junio la primera parte del Proyecto en las comunidades de Chalam y Sacchim en Huehuetenango, en donde se benefició  a 12 familias con 4 viviendas híbridas, se trabajó en 4 ampliaciones, se entregaron estufas y letrinas y se realizaron pisos de concreto, con el objetivo de mejorar la salud de las familias que viven en condiciones de vulnerabilidad.

María nos comenta “Me siento feliz de tener una habitación y que mis hijos mayores también disfruten una”

 

Don Juan nos indica “conforme hemos ido usando la estufa, hemos gastado menos en leña, también  hemos utilizado la ampliación y nuestra letrina, nos sentimos muy contentos”

¡Gracias por cambiarnos la vida!

 

¡Disfruto de nuestra habitación, mi cocina, todo!

¡Ahora estamos más sanos con nuestro piso!

¡Podemos cocinar todas nuestras comidas al mismo tiempo!

Esta vivienda me ha cambiado

Blanca, su esposo y 2 niños son los dueños de una vivienda Hábitat, ella se dedica a vender  cosméticos, y cuidar a sus hijos y el hogar, su esposo trabaja trayendo carros de Estados Unidos.

Ella nos cuenta que alquilaron durante 5 años, pagando mucho más de lo que pagan por su casa propia, sin embargo, durante ese tiempo, lograron comprar un terreno, en el cual ahora está su vivienda.

 

El papá de Blanca le habló sobre Hábitat,  así como  una amiga que es voluntaria, por lo que con la información que tenían decidieron acercarse y ver si era posible asociarse a Hábitat y construir su vivienda. La noticia no tardó en llegar, y el crédito fue aprobado, por lo que con el esfuerzo de su trabajo decidieron empezar a construir.

“Nos tardamos en pasarnos a nuestra casa porque decidimos hacer un cuarto más con su baño, ahora me siento contenta, porque estamos invirtiendo en algo propio, tener casa propia es una bendición de Dios, y es una gran ayuda porque nos la dieron con facilidades”.