Una vida dedicada a transformar comunidades

En Hábitat para la Humanidad Guatemala nos unimos en profundo pesar por el fallecimiento de Terry Laney, ex Director de Habitat for Humanity Our Towns en Carolina del Norte, y un aliado incondicional de nuestra misión.

Terry y su esposa M.C. han sido pilares fundamentales en el crecimiento de Hábitat para la Humanidad Guatemala. Desde su primer viaje en 2003, motivado por el deseo de conocer de cerca el impacto del diezmo que su afiliado local enviaba desde 1988, Terry quedó profundamente conmovido por las familias guatemaltecas y por la calidez de nuestra gente. Desde entonces, realizaron más de 25 viajes a Guatemala, liderando grupos de voluntarios por medio de Aldea Global y estrechando lazos de amistad que se convirtieron en verdaderos lazos familiares.

Su liderazgo y compromiso trascendieron la construcción de casas: Terry creía que el verdadero impacto estaba en las relaciones. Compartió jornadas de trabajo hombro a hombro con familias, albañiles y voluntarios. Celebró bailes y cantos en los sitios de construcción, y vivió momentos inolvidables, como cuando construyó un “estufa mejorada” para salvar la vida de un niño de 19 meses, gesto que marcó su vida personal.

Para Terry, Guatemala no era un destino de voluntariado, sino un segundo hogar. Su visión inspiró a personas de todas las edades y orígenes (estudiantes, profesionales, familias, iglesias) a sumarse a la misión de construir no solo viviendas, sino también dignidad y esperanza.

Su partida deja un vacío inmenso, pero su legado perdura en cada familia que hoy tiene un techo seguro, en cada comunidad fortalecida y en cada voluntario que regresó a casa con la certeza de que todos, sin importar dónde vivamos, compartimos el mismo sueño: un lugar seguro y saludable para nuestras familias.

Terry siempre vivirá en nuestros corazones y en el de las familias que conoció. Su vida fue testimonio de que la solidaridad no tiene fronteras.

Gracias, Terry, por enseñarnos que cada block, cada abrazo y cada momento compartido pueden cambiar el mundo.