Construyendo sueños – Rosario Archila

El 24 de enero del 2019 se cumplieron 2 años del incendio que destruyó la vivienda de Rosario “Gracias a Dios mi mamá y mi hija no se encontraban en la casa en ese momento” fueron sus primeras palabras. Eran las 10 de la mañana cuando Rosario recibió una llamada de sus vecinos avisándole que su casa se estaba quemando, acabando con todas sus pertenencias que con mucho esfuerzo las había adquirido.

El incendio solamente les dejo la ropa y los artículos que tenían ese día, vecinos de buen corazón ayudaron a la familia otorgándoles un cuarto en donde ellas pudieran descansar tranquilamente. Durante meses Rosario alquiló un cuarto muy pequeño en donde vivía su mamá, su hija y ella.

La tristeza la invadía al recordar todo lo que perdieron, los momentos de felicidad y alegría se esfumaron en esas cuatro paredes que ahora se habían convertido en cenizas. La preocupación más grande de Rosario era que ya no tenía una casa, un techo, un lugar seguro para su hija y su mamá; sin embargo, no perdió la fe en Dios y decidió buscar organizaciones que la pudieran apoyar en la construcción de su vivienda.

Vecinos le hablaron de Fundación Hábitat, y Rosario inmediatamente se acercó a nuestra oficina en San Marcos; en donde sin dudar le brindaron el apoyo para la construcción de su vivienda. En los días en que se iniciaba la construcción de su vivienda, a Rosario le notificaron que debía de salir de la casa en donde estaba hospedándose, por lo que un grupo de voluntarios extranjeros apoyaron en construir el sueño de la familia entregando sus manos y corazón terminando la construcción de la vivienda en un mes y medio.

Ahora la familia tiene un espacio seguro y saludable, se sienten bendecidos al despertar en su nuevo hogar, como Fundación es gratificante ser parte del cambio en la vida de los guatemaltecos y apoyarlos en las necesidades que cada uno de ellos tiene.

 

“Gracias por la ayuda que Hábitat y los voluntarios nos dieron en el momento que más lo necesitábamos, pasamos tiempos muy difíciles con  mi familia pero gracias a Dios ya tenemos un hogar”. Rosario Archila.